Luego de un
escandaloso debate interno, me he decidido a mostrar otra veta literaria: la
dramaturgia. Aquí les va un fragmento de “La Verdad”, obra que escribí
recientemente…
Escena V
La verdad del político
Nuestros personajes llegan a una especie de
plaza, donde se observan dos estrados, dos hombres parados en cada uno de ellos
y una muchedumbre delante.
Verídica:- Ahí tenés a dos candidatos
Joven:- ¿Y quienes son esos que van detrás?
Verídica:- Sus camadas de mentiras, obsérvalas a través
de tu cristal, verás que todas ellas caminan en un solo pie
Joven:- ¿Y eso por qué?
Verídica:- Pues
porque la mentira se para sobre un pie... la verdad sobre los dos… vamos
acerquémonos… es hora de sus discursos
Los políticos
comienzan con sus discursos. Hay uno que habla más honestamente que el otro,
vemos como sus mentiras se empiezan a unir entre sí, volviéndose una y
parándose en ambos pies.
Joven:- ¿Qué
pasó?
Verídica:- Cuando
una mentira apoya su otro pie, es porque le ha llegado la hora de convertirse en
verdad
Joven:- ¿Cómo? No
entiendo…
Verídica:- Claro…
observa a todos estos crédulos a tu alrededor, ellos le han dado fuerza a esas
mentiras para convertirse en una sola verdad, ellos han creído en ella…
Joven:- ¿Y qué
ocurre con el otro candidato?
Verídica:- Se
encuentra en un torbellino imparable, una mentira desata a otra, mira como se
reproducen… quien dice una mentira no sabe qué tarea ha asumido, porque estará
obligado a inventar veinte más para sostener la certeza de la primera. ¿Ves
cómo se minan los campos de flores y crecen sobre ellas nuevas mentiras? ¿Las
ves paradas como flamencos de medias falsas?… La mentira produce flores, pero
no frutos…
Joven:- ¿Querés
decir que las mentiras embellecen al mundo?
Verídica:- Si,
pero engañosamente… sirven para el presente… sin mentiras, la humanidad moriría
de desesperación y aburrimiento…
Joven:- O sea que
la verdad existe. Sólo se inventa la mentira.
Verídica:- Algo
así… el asunto es capcioso… las mentiras nacen de las mentes imaginativas, esas
mismas mentiras pueden ser las nuevas verdades, todo depende de cuán originales
sean y claro está, del cristal con que se las mire… yo misma puedo perder una
pierna y terminar siendo una mentira…
Joven:- Pero,
¿cómo es posible?
Verídica:- Las
mentiras son nuestras hermanastras… y tanto nosotras como ellas, vivimos de la
fe que ustedes depositan en nosotras… hay verdades que se añejan, envejecen y
terminan por extinguirse, las gente las cree anticuadas y las toman por
mentiras… conocí una verdad que se vio notablemente afectada por los vientos
del nuevo tiempo y empezó a palidecer y la gente desconfió de ella y ella se
convenció de que no era más que una simple mentira y terminó por desaparecer…
así como he conocido mentiras, que crecen día a día, porque más personas creen
en ellas y así terminan dotándose de la seguridad necesaria para apoyarse en
ambas piernas y poder caminar a paso firme entre los hombres…
Joven:- Quizás
vos naciste mentira…
Verídica:- ¿Querés
que te cuente la historia de mi nacimiento?
El joven asiente con
la cabeza. Verídica empieza a recordar…
Verídica:-…hace
mucho tiempo atrás, en las antípodas de este mundo, eran pocas las verdades
desperdigadas en él… muchas tenían miedo de los hombres y se mantenían
escondidas (como ahora, que muchas de ellas se reservan para el futuro, porque
la humanidad no está preparada para recibirlas)… pero el hombre las necesitaba,
como el niño que necesita de la leche materna para crecer y sobrevivir… y como
las verdades difícilmente se mostraban, el hombre decidió inventar las suyas
propias, las artificiales, llamadas “mentiras”, alejadas de las genuinas hijas
del mundo… desde aquellos tiempos, no somos nosotras, sino las mentiras,
quienes constituyen la fuerza que mueve a la sociedad
Joven:-
Comprendo… pero ¿cómo esas mentiras fueron siendo verdades?
Verídica:-…Si se
despedaza una mentira, los pedazos son la verdad… el hombre lleva un rastro de
verdad dentro suyo, era predecible que su imaginación e inventiva canalice en
sus creaciones algo de esa verdad genuina… así es que todas las mentiras
contienen pequeñas verdades… se encuentran en estado de gestación… yo crecí en
el vientre de una mentira, junto a otras verdades… dicha mentira llegó a ser
tan inmensa que logró que nadie dudara de ella y su poder fue tan grande que un
santo día explotó, diseminando verdades por doquier… yo soy uno de sus frutos…
así nacen las nuevas verdades… las antiguas, como aquella niña con quien
tratamos, se muestran en raras ocasiones, se han criado con miedo a los
hombres… se asemejan a almas infantiles que temen la mano adulta… aún así, casi
ninguna verdad es absoluta, completa, eterna e inamovible, por eso en los ojos
de esa niña podías ver todavía un destello inocente de ingenuidad sincera…
El candidato más
deshonesto empieza a disparar con más vehemencia su discurso, logrando que
nuevas mentiras broten en el lugar. Éstas someten a la muchedumbre democrática,
mientras que la simple y solitaria verdad del otro candidato lucha en vano por
liberar a la masa. Este último candidato desiste en la idea de gobernar y se
marcha derrotado de allí, seguido por su verdad.
Verídica:- La
fuerza de este tipo de mentiras es notablemente superior al poder de una única
verdad, la muy desgraciada no puede valerse por sí sola…
Joven:- Vámonos
de aquí, ya vi suficiente…
El joven cargando a
Verídica a sus espaldas se abre paso entre la muchedumbre enardecida y escapa
de allí…
Elugo
esta la conozco... increíble Elugo, bello como siempre. grande!
ResponderEliminares muy bueno, a mi me hubiese gustado mas si los diálogos fueran mas sencillos y en un lenguaje vulgar.
ResponderEliminarSí los diálogos fueran más sencillos y el lenguaje más vulgar ¿no me estaría traicionando a mí mismo al abandonar mi estilo? además, es el tono que tiene toda la obra... lo veo como un tómelo o déjelo. he ahí el gran dilema del artista: ¿contentar al público o a sí mismo?
Eliminar10 puntos!
ResponderEliminarEstá muy bien y tiene muchas reflexiones interesantes. comparto un poco las palabras del Manso.
ResponderEliminarAbrazo
ídem respuesta al Manso!
Eliminary tampoco me parece un lenguaje rebuscado, para nada...
Eliminarhey! dramaturgo, lo haces muy bien!
ResponderEliminarbueno bueno
ResponderEliminaresta muy bien, me gusto, da para releerlo porque me perdí en algunos momentos.
ResponderEliminarabrazo de gol
Muy bueno, parece un diálogo platónico adaptado al tiempo moderno y muy cierto lo que dice.
ResponderEliminarAbrazo
jajaja filosofanding se llama esta sección. Cierto que tiene una naturaleza similar a alguna alegoría platónica, como la del carro alado de las verdades... Salud!
EliminarLe agradezco el convite. Celebro la elección del lenguaje. Y la alegoria o concepto de la mentira fragmentandose en inevitables verdades, dificilmente se me olvide. Eso pasa con la literatura, te ofrece algo que queda.- Muy bueno que pase eso con tu texto... Gracias, te feliciito!
ResponderEliminarSeñor... no agradezca el convite, lo tiene merecido! Gracias por estar de mi lado con este tema del lenguaje! Es un orgullo y una sensación hermosa poder dejar algo en alguien con tan solo palabras! Gracias. Salud!
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPará, ahora sí. Decía que me pareció muy bueno y que no entendía el por qué tuviste un debate interno para subir algo como esto.
ResponderEliminarAbrazo
jajaja gracias Sigma... la causa del debate era mi temor a los fundamentalistas del teatro, nada más y nada menos... los hay a cantidades y están agazapados por doquier, y que un simple mortal sin conocimientos de dramaturgo venga a querer escribir teatro es la ocasión perfecta para que ataquen... hasta ahora no ha pasado nada, pero hay dos hombres de negro a la puerta de mi casa, gesticulan mucho, sospecho son actores...
Eliminar