sábado, 28 de enero de 2012

nada mas que una impresión

 ... el sonido del todo, de ese barullo bien formado, ese pire frenético evocado constantemente en quejidos de miles de miles de bichos que se esfuerzan a toda garganta para no dejar sola a la vida, para no abandonar en la ardua tarea de escuchar el silencio, de ver un poco mas allá de lo que nos muestran nuestros sentidos pillos, precarios y mentirosos. cuando un sentido está al límite, es cuando aparece la verdadera naturaleza , ojos que no ven y proyectan, oídos sordos que escuchan gritos y nervios totalmente abandonados que no se rinden, que sienten todo aquello que el abandono no soporta. cuando la oscuridad es tal, cuando el cerebro ansioso no entiende que está pasando, cuando la pupila no puede por mas que se esfuerza con todas sus fuerzas en captar un rayito de sol, menos que eso, algo de luz, cualquiera, pero rellenar de alguna manera esos pixeles negros que no paran de abrumar, asustar y meterse en el corazón del ser. tal vez pueda que un cerebro también tenga la habilidad de disfrutar de la herramienta que el mismo se impone para no avanzar en un campo que no le pertenece, o en el mas osado de los casos pertenecerle a esa, esa...
                                                                                                           tito