viernes, 3 de agosto de 2012

una mano al olvido



 I

 Por primera vez en semanas siento la necesidad de escribir. Escribir me parece en este momento una actividad tan importante para mi salud como comer cuando se tiene hambre, como tomar agua cuando el cuerpo siente sed. Pienso que si escribo un cuento sobre ella quizás me ayude a olvidarla, a quitarle fuerza y realidad a su presencia, a pensarla solo como literatura.
Escribo, para olvidarla, un cuento sobre ella. Hace días, que de manera similar, me sucede que me voy a dormir para descansar de pensarla, para apagar por un momento la idea en la que no he dejado de pensar desde que estoy despierto y el sueño es una continuación de mis días en la tierra, con ella, con amigos, guardando siempre la distancia, los silencios, el debido respeto.

 II

 Lo último que veo antes de irme es a vos bailando con los ojos entrecerrados, un poco borracha, encantadora, y a un hombre a tu lado. El resto del camino es pisar el recuerdo, amasarlo de acuerdo a la forma exacta de mis miedos, de mi lucidez, de mi lado más perverso. La imaginación es un torturador que encontró el gusto a la tortura. Te imagino ahora un poco recostada contra la pared, dejando que él te corra el pelo detrás de la oreja, que te hable cerca al oído, cómo puede ser que no le digas nada, cómo puede ser que tengas tantas ganas de que te coja ese pibe, me pregunto, mientras veo cómo te agarra de la mano y los dos caminan hasta tu cuarto, a la oscuridad del cuarto y las sábanas revueltas, mientras veo como te toca las tetas y te mete la mano en el vaquero sin desabrochar, y la ropa mojada y tus ojos en la oscuridad, mirando hacia el techo como persiguiendo mariposas entre el aire humedo y el polvo, sin decir una palabra, asistiendo, yo mismo al tiempo que me alejo a la forma obscena y tácita en que a todo le decís que sí.


 III

 Pensar en ella se parecía a pensar en la palabra nunca.
 Solo a veces me permitía la posibilidad de imaginar que hubiese pasado si algunas cosas hubiesen sido distintas, lo cual equivalía a pensar un mundo idéntico pero escencialmente distinto, en el que vos fueras vos y yo sea yo, y vos no me conocieses. Entonces yo me acercaría, te vería bailando y te hablaría despacio, haciendote reír para ver como bajas los ojos hasta el piso una vez que pasa la risa, sabiendo que tengo todo el tiempo por delante, que te puedo pedir un teléfono y tener ganas de llamarte al otro día, que tenes ganas de conocer a alguien, que te gusta hablar conmigo y te pone nerviosa, porque soy hombre y vos sos mujer y los dos sabemos a donde nos lleva esto. Entonces imagino que soy yo el que te corre el pelo para hablarte, que camina de la mano con vos hasta tu cuarto, que te busca la mirada entre el aire del cuarto y las mariposas, y que oye la respiración entrecortada, y cada uno de los sonidos pequeños que parecen escapados de la bolsa del silencio.
 A la mañana cuando te diga que no puedo creer que esto esté pasando, y vos te rías tapando la verguenza entre las sabanas, es imposible que comprendas del todo el significado de mis palabras.

  IV

 No encuentro las palabras. Hace días que vengo peleando con el relato y nunca logro estar del todo conforme con lo que escribo. Esto es mierda, me digo, y después es volver a empezar. Sin embargo mi proposito era simple: escribir una historia de amor velada, en que nada sucediera, en que las palabras sean como una ventana que dejase ver el sentimiento de cierto hombre hacia cierta mujer. Pero las palabras se vuelven opacas, no logro encontrar el tono justo que pide el relato, su transparencia.
 Quizás tenga que ver con eso que decía Nietszche de que solo encontramos palabras para lo que está muerto en nuestro corazón. ¿Cómo yo entonces puedo escribir un relato sobre lo que me pasa en este momento, sobre lo que está pasando en mi mientras escribo?
 Cuentan que Becquer recomendaba a las mujeres desconfiar de los enamorados que querían demostrarles su amor a través de versos. Si la poesía es buena, decía, desconfíen. Si es mala crean.
 Esto es mierda, me digo ahora, porque es real. Porque detrás de las palabras hay algo vivo. Un animal que se niega a ser capturado. Detras de las palabras estás vos. Respirando.

                                                                                               Seoane

12 comentarios:

  1. Que regreso mi querido amigo. Cuando leí esto me di cuenta que extrañaba esta lectura.

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  2. Seoane! aplaudo su regreso y aprovecho para reprocharle su desaparición.
    Me gustó mucho su texto, está bueno. El tono es preciso y utilitario con la historia, un gran acierto La catarsis es efectiva y me puso inmediatamente en situación.
    Lamentablemente, en mi humilde opinión, usted oculta inecesariamente más de lo que muestra y eso es un pena. Deja ver un poco de ternura, cansancio y apenas algo de rabia con la situación que vive, aunque todo muy amable y respetuoso. El resto se la guarda para usted. Personalmente, en este caso preferiría una mentira grande, impune e infame, a su silencio cortés; pero no me tome mucho en cuenta, hoy me levanté un poco revirado.
    Le agradezco por esta lectura y lo conmino a publicar algo la próxima semana.

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  3. buenisimo. muy bueno.ceci

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  4. me pareciò encantador, y triste , como teñido por alguna sombra.
    me gustò leerlo. gracias

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  5. Primero, me gusta leerte. Tu escritura es bella, y la belleza acaricia. Le da sentido al mundo.
    Segundo, qué razón tendría para hablarte de literatura, si es buena, si es mala, describirla; si me llegó al corazón. Qué sexy, Seoane, y qué desesperado. Tal vez a veces esas dos cosas sean la misma cosa. La pasión... y su revés.
    Abrazos, amigo.

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  6. bellisimo, gran texto gran... es una pequeña molécula en el rico univerSeo que sé que hay en vos loco. en mi humilde opinión, estas para algo inmenso.. abrazo fuerte Seo.

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    1. Bueno bueno bueno... este
      el toman aun le queda grande a este muchacho asi que por ahora tiene contrato hasta el 2015

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  7. muchachos
    muchas gracias por cada comentario
    yo estoy contento en el lugar en el que estoy, acá entre ustedes, y lo único que espero de la vida es que me de los huevos para poder publicar el viernes. Hoy estuve todo el día con algo adentro, y a veces me olvidaba lo que era, y después me acordaba. y era que había vuelto a escribir, a publicar, a compartir.
    espero no haber ofendido a nadie con mi ausencia
    gracias
    por todo

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  8. Seoane me gusto mucho! Si hay algo en que creo es que no hay palabras si no hay corazon, y supiste demosrrar eso.

    Espero leer mucho mas de esto!

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  9. CLAP CLAP CLAP! De pie señores volvió Seoane! Excelente querido siga así!

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  10. Muy bueno,excelente! La primera vez que leo algo sobre este bolg,gracias a una invitacion por facebook y de este momento soy un nuevo seguidor.
    Gracias.

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