La cuchilla golpea la madera en la noche, destroza el morrón, después
la cebolla y así.
No hay nadie en la cocina, nadie en la casa.
Cuánto sufrimiento ha sido acompañado por este sonido, el
de la cuchilla golpeando la madera, cuantas lágrimas habrán caído sobre los
morrones rojos y verdes que se reflejan en los ojos de quien los ve.
Cuantos
sueños se abandonaron?, cuántas vidas pensadas se dejaron ir?, cuantos amores han
muerto?, cuanto tiempo ha pasado?.
Los movimientos casi automáticos del cuerpo,
persiguiendo un fin inmediato.
No existe otro sonido que el de la cuchilla golpeando la
madera en la casa vacía, desde otra habitación se puede percibir la pena, el
sonido fugaz y triste del golpe, de quien lo da.
Nano
Uf.
ResponderEliminaruffff
ResponderEliminarexelente hermano
abrazo