sábado, 23 de marzo de 2013

el ombligo

bajo la guardia para descubrir
que todavía puede lastimarme       
 
lo veo, hace el esfuerzo
intenta con todas sus fuerzas
entender, controlar las palabras
los ojos
se me caen las cosas de las manos
me miro la torpeza con asombro
memoria trémola del cuerpo
cerámica quebrada
vidrio roto
 
todavía me pide que sea mi madre
le pregunto por qué se pone triste
cuando me hace feliz
me contesta que lo hago sentir viejo
que lo acerco a la muerte
desde que nací

puedo ver cómo quiere
que todo salga bien
y acá estoy sin poder escribir
una idea, una bella metáfora
un encadenamiento con sentido
de ideas y metáforas
sola confesionando
uno palabras cónicas
caen por el embudo 
acarician mi ombligo
y nada más
 
la gata flora

jueves, 21 de marzo de 2013

La victoria del ego.



-Permiso, permiso, permiso, haber señora si no se mueve no me puedo bajar, señora, por favor, me hace el favor. ¡Doña!, ¡doña!.
En eso veo que un pasajero la esta mirando muy de cerca. La vieja como los peces, nada.  Le pregunta “señora ¿se siente bien?” Nada, nada de nada.
-Creo que murió.
La puta madre lo que me faltaba, una vieja muerta en el bus y yo llegando tarde.
-Chofer, chofer, tenemos una vieja muerta, frene y llame a una ambulancia, o a una cocheria.
Creo que soné un poco seco, porque todos me miraron con sus caras de reproche, desaprobando mi lunfardo. Trato de excusarme, de poco sirve.
-Bueno, murió que va ser, es la ley de la vida, se nace y se muere.
El bus frena, llama una ambulancia. Un niño llora, la madre parece no darse cuenta, con sus ojos clavados en el fiambre es presa de un horror que sin dudas el hijo esta sintiendo. En la radio suena “la plaga” en versión original, que raro. La gente ya cuchichea, que pobre doña, que vergüenza, que seguro nadie la visitaba, que la vida es cruda, que todo sigue, etc.
 Yo no puedo dejar de pensar en lo que me dijo me jefe ayer “una vez mas tarde, y a la mierda con vos, ya estas lo bastante grande pa estas bobadas, esto es un laburo macho”. Esto igual tiene que servir de escusa, es una vieja muerta en el puto bus. De repente recuerdo un gran capitulo de Seinfeld, en el que Georg tiene que justificar un viaje por un velorio. Claro. Preciso una foto. Salgo del bus celular en mano, tiene que ser algo rápido, la gente no aprueba estas cosas. ¿Será la sensibilísimo amarillista del humanismo que se nos a pegado en el corazón?, que se yo, no es hora de ponerme a pensar en esto, ¿o si? Como si fuera un famoso el fiambre me le arrimo rápido, pongo mi cara junto a la de la vieja, la toco sin querer, esta bien fria, uhhh, me esta entrando el humanismo y pimba clic, foto tomada.
-Sos un degenerado hijo de puta- me dice un paramédico.
-Anda cagar, quien sabe que le aran ustedes a los fiambres aya en el depósito, si hasta se los montan.
Piñaso en mi cara, suelo, la gente aplaude. Sangre, eso no estaba en los planes del paramédico, tampoco en los míos, pero es genial, un corte en la ceja si es un gran justificativo, además si nadie en el bus aprobó lo de la foto es de esperar que tampoco lo haga mi jefe.
-¿Che te jode llevarme en la ambulancia y ponerme unos puntos?, y la dejamos por esta, nada de policías ni nada.
Mi mejor cara de cordero colgado esperando la ejecución funciona, y el paramedico saca a relucir, in extremis, su humanismo. Excelente. Ahora a pensar en una buena historia. ¿Ayude a una señora en una rapiña? Demasiado para alguien como yo, ¿una rapiña a mi persona con culatazo en el ojo? No es mala pero no tengo denuncia policial. Pero por suerte la inspiración llega sola, en el asiento trasero de la ambulancia, con la vieja a mi lado veo por la ventan lo que estaba buscando, adolescentes pelando. Claro, fui a separar y me comí una de garrón. Encaja justo. Mejor imposible. Me pongo los auriculares, puedo escuchar Darwin deportivo. No se que me cruza por la cabeza pero le meto una beso a la vieja y la abrazo fuerte.

                                                                                  tito

miércoles, 20 de marzo de 2013

(Luz)



Comienzo a entrar en ese mundo tan místico, tan irreal, como ver galaxias en todo momento.Infinitas estrellas fugaces, meteoros, cometas, novas, supernovas; explosiones en un recital de movimientos y sonidos, como puede ser esto tan Irreal? No puedo creer esta bóveda que me contiene.Este nucleo en el que habito por momentos, todo lo veo, todo lo siento.
Esta esfera radiante que me persigue en sueños vertiendo toda su sangre plateada sobre mi cuerpo entero recorre cada una de mis neuronas, activándolas en un choque eléctrico:Nervios. Comienza el baile de mi cuerpo en una circunferencia de movimientos rítmicos-arritmicas vueltas, vistas al derecho y al revés.

Como explicar la Luz si nunca has cerrado los ojos, no puedo hacerlo, Luz es dentro en la Calma de nuestros sentidos, en el Silencio de nuestro pensar, he allí donde debemos buscar. Eso sucede, y tremenda es esta Luz que nace del centro del pecho pero hacia adentro porque esta Luz nunca esta con el Sol, siempre lo persigue.
Como Yo*
Como Todos*
Y bienaventurado aquel que lo persigue porque cuanto más larga sea su  persecución, más Luz gurdara en su interior.
Cierra tus ojos y dime con cuanta Luz cargas Hoy…

                                                                                         Naza

lunes, 18 de marzo de 2013

Pensamiento conjugado



Como cualquier otro día, mochila en los hombros, auriculares en los oídos y Le Moulin de Jann Tiersen sonando. Es el día casi ideal para andar en bici, voy tranquila pero no tanto porque, aunque me niegue a mirar la hora, sé que voy a llegar tarde.  ¿Empezar por donde? ¿Cuál  es el principio? ¿De qué es el principio? ¿Hay un comienzo? ¿O sólo somos sucesiones de hechos y acontecimientos que nos definen y nos redefinen? Un principio entendido como el comienzo de un final, un final de época, un momento de transición, en donde hoy el pensamiento y las palabras hechas letras son los protagonistas.
Son muchas preguntas. Son muchos cómos, muchos por qué, muchos dóndes y muchos cuántos. Y generalmente las respuestas son miradas, gestos, pensamientos compartidos, ideas, risas, besos, rayos de sol, gotas de lluvia. La mente es tan particular y perversa que como para no dejarte tranquila te mantiene con varios pensamientos a la vez. Entonces también pienso, que ojalá que no caiga ninguna gota de esa lluvia porque estaría bastante jodida. Preguntas.  Nunca van a aparecer esas respuestas, nadie las va a responder, no las vamos a leer y nunca habrá quórum. El aprendizaje se trata de reformular las preguntas, de cuestionar lo anterior como ideal, crecer es entonces tener preguntas nuevas, tener nuevos cómos, porqués, dóndes y cuántos adaptados en otra realidad. Y entre tantas preguntas y rincones de la mente pienso en cómo los colectiveros pueden ser tan hijos de puta, absolutamente todos vimos a la viejita con bastón que lo corrió una cuadra y éste no la esperó.
Preguntas y reformulaciones de preguntas. Mientras tanto, escribimos la historia, somos ella, vamos a ser parte de ella y nos definimos a través de ella. Por eso, mal nunca va a estar tener convicción y llevar adelante nuestros propios principios de base como herramienta para responder aquellas nuevas preguntas, que nos condicionan, que nos reprimen, que nos subsumen y así transformar la realidad, o intentarlo. Florecen los nardos.
La historia. Relatar acontecimientos, grandes hitos, describir la historia de los pueblos oprimidos, la historia de la humanidad, de las grandes ideas, de las sociedades en todos sus momentos, de próceres, de la pobreza. Historia es eso y más: la historia también es la que construimos hoy (actuando, pensando, escribiendo, hablando) esa es parte de mi historia y de la de los demás. Esos pequeños momentos, tan breves en la historia como un suspiro, pero vivos como una revolución, nos definen de sobremanera. Manifestados de forma consciente e inconsciente, claro. Heredados, internalizados, incorporados, institucionalizados. Se representan con nuestra cara, con el discurso, que sólo tienen sentido a través de esa interacción con el otro. Ese otro que es un mundo distinto, que es ni más ni menos que una historia. Un otro en busca de respuestas para sus cómos, sus porqués, sus dóndes y sus cuántos. Involuntariamente el pensamiento se corta ya que sin auriculares tengo el agrado de escuchar “mi amor, no me movás así la cuna que me vas hacer vomitar al bebé”. Nefasto. Horroroso, a ese culiado del taxi no le hacía ninguna falta tener que relacionarse con otros actores de la sociedad para darle sentido a su cara, se definía por sí sola: un pajero.
Llego al lugar de destino, tarde como lo había especulado, ya bastante cansada. En ese sillón la frustración se acomoda conmigo. Durante los regresos por lo general no escucho música, y también prefiero no pensar en nada.

                                                                        Myriam Stefford

viernes, 15 de marzo de 2013

Es fácil respirar cuando se tiene el mar enfrente


 Por un tiempo ninguno de los dos hablamos. No lo recuerdo pero estoy seguro que dijimos las palabras justas.
 Le tocaba hablar al mar ahora y a nosotros escucharlo. El tiempo que hiciera falta.
 A los dos nos encantaban esos momentos.
 Estar en la playa acostados en la arena, viendo la luna llena subir en el cielo.
 Todavía no había oscurecido pero ya el aire fresco anunciaba la noche. Dentro de poco la luz de la luna nos dejaría ver las caras.
  Era en momentos como ese cuando pensábamos que todavía podíamos hacerlo.
 Los dos nos conocíamos y era bueno estar uno junto a el otro. Sabíamos todas las cosas por las que no valía la pena estar vivos y teníamos tiempo para encontrar el resto.

                                                                      Seoane

miércoles, 6 de marzo de 2013

una mirada


Sin quererlo fue que encontré tus ojos, una noche fría, cerca del río, en un cumpleaños. Tiempo después el destino volvió a cruzarnos. Tu mirada cada vez más cautivadora. Cada vez más linda. Y al sentirte posar fui absorbido por la mas hermosa sensación del mundo, el deseo inexplicable del imantismo femenino. Pero me contuve. Tan torpe que no lo sabía. Pero hay cosas que se nos escapan, cosa que no podemos controlar, por suerte. Mis células pedían a gritos encontrarte. Entonces la magia surge, la segunda chance aparece. Y sumido en el personaje más mundano de mi repertorio, te vi de nuevo. Y la física, mi enemigo acérrimo, me puso a prueba. Mi alma no fallo, el impulso vio como tenia la pradera por delante, y corrió, y corrió. Alma libre, alma tranquila.

                                                                                                                tito